Pues bien, hasta allí nos desplazamos mi mujer y yo, para participar en otra media, la primera de las dos que voy a correr este mes de octubre.
Llegamos pronto, a las 15,45 h ya estábamos allí. Estaban preparando, terminando de preparar los últimos detalles. Fuimos a recoger el dorsal. yo pensaba "que poco movimiento hay, no se ve a casi nadie". A las 16,30 h. me puse a calentar y aquello seguía bastante apagado. Nadie hablaba por el micro, la música casi ni se oía. Todo muy diferente a lo que estamos acostumbrados por nuestra zona. Bueno cambio de calle para calentar musculatura y empiezo a ver corredores, calentando calle arriba y calle abajo. Pienso "bueno menos mal que no corro yo solo".
Se acerca la hora de la salida y en el arco de meta se agolpan unos 150 corredores entre las tres modalidades, una de 7 km, una de 14 km y otra de 21 km. ¿Por qué 7, 14 y 21?, pues porque el circuito era de 7 km y había que dar una vuelta, dos o tres, según inscripción.
El recorrido totalmente urbano y 100 por 100 asfalto, con una pequeña peculiaridad, que nadie se podía perder. ¿Os acordáis de una serie de Emilio Aragón que siempre seguía una línea blanca?, pues el circuito era así, Estaba marcado con una línea blanca continua. Pero era duro, el circuito era duro, un 25% subida, otro 25% bajada y el resto, combinaciones de subidas y bajadas continuadas. Un rompe piernas, vamos.
A mi parecer el circuito era un poco aburrido con tres vueltas, pero para la gente que estaba de espectador, les parecía mejor ya que nos veían pasar varias veces y nos animaban mucho.
Para ser una media dura no me fue nada mal, paré el crono en 1h52'. A la llegada me dieron la bolsa del corredor, con camiseta y una longaniza.
Nos dirigimos al pabellón donde nos habían dicho que habría cerveza y una merienda para todos los participantes después de la entrega de trofeos y sorteo de regalos. Efectivamente había barra libre de cerveza y refrescos y además tenían puestas tres largas mesas con pan, patatas de bolsa, tortilla de patatas, trozos de longaniza y chorizo a la brasa, agua...
Bebimos un poco, comimos un poco y cogimos el camino de regreso a casa.
Por cierto, nos estuvo comentando un chaval de la organización muy majo, que allí en Monreal del Campo, en el mes de febrero tenían una carrera llamada Frio Extremo 10k. Nos estuvo contando que era nocturna, con salida a las 7 u 8 de la tarde, que había que correrla con frontal y que se llamaba frio extremo porque, en febrero a esa hora y en esa zona, igual el mercurio podía marcar -5 grados, pero que aún así era una carrera que gustaba mucho. Nos animó a participar. Yo ahí os lo dejo, por si alguno quiere probar.
Bueno a lo que íbamos, cogimos carretera dirección Fraga, pues al día siguiente tenía carrera de 5km en Algerri. No es que me apeteciera hacerla, pero tuve que apuntarme porque formaba parte de un plan que habíamos maquinado entre todos los Chispis... pero bueno eso ya forma parte de la crónica de la Cursa del Dúgol.
Esta semana tenemos por delante la Cursa del Aeroport, cuya fecha coincide siempre con la fiesta nacional de la Virgen del Pilar y el domingo la Cursa de Sant Miquel que ya sabéis que tuvo que ser aplazada 15 días.
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