martes, 21 de junio de 2016

1ª Trail Muralla de Daroca


¿Qué pensabais? ¿Qué este domingo íbamos a descansar? Que va. Este domingo marcha senderista de 18km con 524 de desnivel positivo.
 
¿Dónde? En Daroca. Un bonito pueblo rodeado de unas preciosas murallas. Allí se estrenaba la 1ª Trail Murallas de Daroca, que constaba de una trail corta de 16 km 471m D+ y otra trail larga, 33km 1140m D+. Además de la marcha senderista, que fue a lo que nos inscribimos Jose y yo.
 
Madrugón. Suena el despertador a las 5'10 h. Llegamos allí antes de las 8. Hacía un frio, 7º marcaba el termómetro del coche y estaba nublado. Buscamos un bar para tomar un café. Buscamos y buscamos. Todo cerrado. Allí dormía todo el mundo. Luego nos enteramos que los dorsales se recogían en el pabellón que estaba en la entrada del pueblo. Vaya podíamos haber parado según llegamos... pero bueno... buscando un bar y luego los dorsales pues no sé sino andaríamos más de un kilómetro. Y además de prisa ya que nos enteramos que la marcha salía a la misma hora que las trails, o sea que al final íbamos pillados de tiempo.
 
Realizamos los primeros cinco en una hora y poco. La verdad se me pasó rápida. Caminábamos por bosques de pinos y también por bosques de encinas y robles. Por senderos por los que solamente podía pasar una persona. Había mucha sombra. En más de la mitad del recorrido había sombras. Un agradable olor a tomillo nos acompañó también durante todo el trayecto. Fuertes y largas subidas. Y bajadas vertiginosas en las que yo me quedaba para atrás. Las bajadas no son lo mío.
 
Avituallamientos con bebida, fruta, chuches, embutido y pan, nos esperaban cada cinco kilómetros aproximadamente.
 
Precioso el paisaje que se podía observar desde lo alto. Las murallas con sus torres que rodean la población y alrededores de Daroca.
 
Terminamos la marcha senderista en 3 horas 55 minutos.
 

A falta de menos de 1 km de la meta

Como anécdotas, comentar que sobre el kilómetro 6 uno de los corredores de una de las trails volvía para atrás acompañado de otro corredor, llevaba la cara toda ensangrentada y una gran tirita en la frente. Y en otro tramo donde nos cruzábamos con los de la trail larga encontramos a un corredor sentado en el suelo, se le habían subido los cuádriceps, le dejamos radio salil en spray que llevábamos en la mochila para que se pusiera en las piernas y continuamos nuestro camino.
 
Al cruzar la meta, dejamos la mochila y los palos en el coche y nos sentamos en una terraza, al sol, desde donde veíamos perfectamente la llegada de los corredores y caminantes que faltaban por llegar y oíamos al speaker felicitarlos a su llegada.
 
Momento de relax, tomando una cervecita, antes de iniciar el camino de regreso a casa.
 
 
Y la semana que viene, ¿tenemos algo???
 

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